Lázaro de Velasco – Catedral de Granada

LÁZARO DE VELASCO: Virgen con el niño

Lc 2,33-35: José y María estaban maravillados de las cosas que se decían de Jesús. Simeón los bendijo y dijo a María, su madre: Mira, éste niño ha sido puesto para ruina y para resurrección de muchos en Israel, y para signo de contradicción y una espada traspasará tu misma alma, a fin de que se descubran los pensamientos de muchos corazones."

LÁZARO DE VELASCO: Virgen de la Expectación

Sobre el atril del reclinatorio en el que ora María está abierto un libro; en sus dos páginas está escrito en latín parte de un versículo del profeta Isaías (7,14): Mirad, una doncella está encinta y va a dar a luz un hijo al que pondrá por nombre Emmanuel...

NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES Fray Pedro de Granada (1687-1715)

El corazón de María atravesado por siete espadas recuerda sus siete dolores: Profecía de Simeón (Lc 2,35), Huida a Egipto (Mat 12,3), Jesús perdido en el Templo (Lc 2,48), Encuentro en la calle de la Amargura (Lc 23,27), Crucifixión de Jesús (Jn 19,25), Descendimiento de la cruz ( Jn 19,38-39), Sepultura de Jesús (Jn 19,41-42). Vosotros que pasáis por el camino, mirad y ved si hay dolor comparable a mi dolor al dolor que me atormenta con el que Yahvé me castigó el día de su ardiente cólera. Lam 1,12

EL PROFETA ELÍAS ARREBATADO POR EL CARRO DE FUEGO José de Toxar (fl. 1761-1768)

2Rey 2,1-18: Iban caminando Elías y Eliseo mientras conversaban cuando un carro de fuego con caballos de fuego se interpuso entre ellos y Elías subió al cielo en el torbellino. Eliseo le ve y clamaba: «¡Padre mío, padre mío! ¡Carro y caballos de Israel! ¡Auriga mío! Y no lo vio más. Tomó entonces sus vestidos y los desgarró en dos. Recogió el manto que se le había caído a Elías y se volvió apartándose a las orillas del Jordán.»

ELÍAS ENFRENTADO A LOS PROFETAS DE BAAL José de Toxar (fl. 1761-1768)

La escena recoge el enfrentamiento del profeta Elías con los 450 profetas de Baal en el sacrificio del Carmelo. Termina la historia con el fin de la sequía gracias a la intercesión de Elías: Poco a poco se fue oscureciendo el cielo por las nubes y el viento y se produjo una gran lluvia (1Rey 18,45).

«NOLI ME TANGERE» Francisco Pérez de Orozco (último tercio del XVIII)

Esta miniatura ilustra la aparición de Jesús resucitado a María Magdalena; según el relato de Juan (20,16-17): Jesús le dice: «María.» Ella se vuelve y le dice en hebreo: «Rabbuní» —que quiere decir: «Maestro»—. Dicele Jesús: «Deja de tocarme, pues todavía no he subido al Padre. Pero vete a mis hermanos y diles: Subo a mi Padre y vuestro Padre, a mi Dios y vuestro Dios.»

LÁZARO DE VELASCO (†1585)

Lázaro de Velasco fue hijo de Jacopo Florentino (Jacopo Torni l’Indaco; 1746-1526;). Discípulo de Siloe y eclesiástico polifacético —traductor, matemático, arquitecto, retablista— minió diversos corales para la Catedral granadina: los de las celebraciones de la Inmaculada Concepción y de la Exaltación de la santa Cruz. Desde 1577 hasta 1581 fue maestro mayor de la Catedral de Granada.
Como iluminador de libros corales del templo catedralicio trabaja en 1550; aparece por última vez en el acuerdo tomado por el cabildo en julio de 1583.

En la primera ilustración reproducida —Virgen sentada con el niño— la capitular S alberga una escena íntima: María acoge a su hijo sentado sobre su regazo: los colores de su ropaje son azul, blanco y rojo (divinidad, humanidad, pureza).

En la segunda ilustración —Virgen de la Expectación— María ora recogidamente ante un libro abierto en cuyas páginas se recoge el texto latino de la profecía de Isaías(7,14) que dice en español: He aquí que una doncella dará a luz un hijo…

La obra de este iluminador en los corales catedralicios, aunque no alcanza las proporciones y magnitud de la de Juan Ramírez, puede parangonársele en calidad.

OTROS MINIATURISTAS

Con Lázaro de Velasco se cierra el ciclo de los grandes miniaturistas de la Catedral de Granada. A partir del último tercio del siglo XVI se produce un franco retroceso en el arte de la iluminación, tanto del libro coral como del libro en general.

En los documentos del archivo catedralicio hay constancia de algunos trabajos en la librería del coro; son obras de Fray Pedro de Granada (1687-1715), José de Toxar (1761-1768), Fray Pedro de Zurita (1783) y Francisco Pérez de Orozco, éste del último tercio del siglo XVIII.